Cerré los ojos y escuché el silencio, la paz que inunda toda la estancia de Cafayate, y después oí el vientito corriendo entre las hojas secas y amarillas que inundan el lugar en esta estación del año. Sentí el fresco de la tarde en mi piel y el aire más puro en mis pulmones. Abrí los ojos y la luz del atardecer pintaba las montañas de dorado y rojo. La niebla en los árboles del horizonte convertían el paisaje en una pintura. Era invierno casi, pero no hacía frío, y los días soleados y secos de estos valles hacen que sea un destino soñado todo el año.
Emplazado en el corazón de este entorno natural ubicado al sur de la provincia de Salta en Argentina, está el Hotel Grace Cafayate , un lujo de lugar con habitaciones, vilas para 4 personas, piscina y un spa recientemente abierto que hace que la estadía sea de las más confortables que puedas experimentar. Cada detalle en Grace está pensado para que te sientas un rey.
Comodísimas habitaciones, un servicio de primera, personal muy amable y predispuesto y las mejores vistas desde la ventana de tu habitación. Me tocó una “Sunrise” que mira al este y despertarme para ver el amanecer desde la cama King size tomando un cafecito expresso y con toda la vista al valle, fue uno de los momentos más lindos que viví en Grace.
La estancia de Cafayate es un complejo tipo country club de 500 hectáreas de pura naturaleza y paisajes asombrosos, con cancha de Golf, de polo, spa y muchos viñedos. El Club House tiene un restaurante con un menú 5 estrellas y desde allí se puede hacer una cabalgata por las dunas de una o dos horas de duración. Además, de sus propios viñedos nace la marca de vino “La estancia de Cafayate”, con un delicioso malbec tinto y un torrontés blanco, especialidad de estos valles, que son procesados y envasados en la Bodega el Porvenir.
Cafayate es uno de esos rincones de Argentina a donde siempre da gusto volver y uno de los motivos es la RN 68 por la que se accede desde la ciudad de Salta. La última hora de ruta atraviesa la Quebrada de las Conchas, un camino lleno de formaciones rocosas de distintas formas y colores, donde se encontraron restos fósiles marinos (de ahí su nombre) y donde se destacan La Garganta del diablo, el Anfiteatro, el punto panorámico Tres Cruces y Los Castillos, entre otros.
En la zona hay muchas actividades para hacer y para todos los gustos. Desde vuelos en avioneta, cabalgatas, a trekkings de distintas dificultades y duración para los aventureros. Y para los amantes del vino hay variadas opciones: Para aprender sobre vino hay que visitar el Museo de la Vid y el Vino, un increíble y moderno edificio en el centro de Cafayate, único en el país, dedicado a la historia y producción de esta bebida.
Para aprender a catar, recomiendo la experiencia Bespoke que ofrece Grace junto a la Bodega el Porvenir . Se trata de una degustación de los diferentes cortes de vino y posteriormente de la creación de un Blend. Fue una actividad muy divertida donde aprendí sobre la variedad de uvas y vinos, y las características de sabor y aroma de cada una. Creamos 3 blends distintos y finalmente nos llevamos una botella del que nos pareció más rico que estaba compuesto por un 50 % petit verdot, 15 % malbec y % 35 tannat. (A pesar de que los blends de vino suelen tener una base de 50 % malbec, desafiamos la normalidad y nuestra creación original resultó deliciosa!)
Hay muchas otras bodegas para visitar, pero tuve la suerte de ir a la Bodega Piattelli . Todo allí me sorprendió: desde el restaurante de la bodega situado en lo alto de una colina con una privilegiada vista al valle y su exquisito almuerzo con un menú de 3 pasos y degustación de torrontés y malbec, a la visita guiada a los viñedos y la bodega donde aprendimos sobre el complejo y largo proceso de creación del vino. Estando en lugares como éste, uno toma conciencia de todo el trabajo y la dedicación puestos detrás de esa botella que compartimos en una comida con seres queridos.
Por último, en la nochecita se puede ir a pasear por la plaza central de Cafayate, visitar el Mercado de Artesanos y comprar algún vino o dulce regional (como el de Cayote, mi favorito!)
Y para cerrar el día, a media cuadra de la plaza, se puede ir a cenar al Bar Bad Brothers . Un lugar nuevo y moderno con mucha onda, con una propuesta gastronómica de tapeo y con vino de producción propia, que recomiendo por su deliciosa cocina y excelente atención.
En los siguientes links verás en 360° el increíble entorno natural de este lugar:
Cualquier duda que tengas sobre Cafayate no dudes en preguntar debajo en los comentarios.
tal cual mi cuenta pendiente Cafayate… me encantó el tema del Blend propio!!!! deben tener unos vinos espectaculares con esas uvas…
eso del blend estuvo genial! aprendí un montón! gracias por leer 🙂
Excelente, me encantó!!
Gracias Javi!
Qué lindo relato! Me trasladaste a Cafayate ♥️
Gracias Vitus!! un placer compartir ese viaje con vos!
Que buena info! Es un pendiente que tengo ir a Salta…
Gracias!! No te lo pierdas! el Norte tiene lugares espectaculares!
Qué linda experiencia!
Gracias 🙂